6 razones para certificarse
Independientemente de la industria en la que opere una empresa, casi con certeza hay un estándar contra el cual se pueden medir sus procesos y rendimiento. En algunos casos, cumplir con el estándar es un requisito legal y, en la mayoría de los demás, es una necesidad comercial para hacer negocios. Afirmar que se cumplen un conjunto de requisitos es una cosa, demostrar al mundo que realmente lo hace es otra. Aquí es donde entra en juego la certificación de su sistema de gestión.
La certificación independiente es una forma tangible y creíble de demostrar a clientes, empleados, sociedad y otros interesados que la organización cumple con los estándares que afirma. La participación de un tercero en la certificación añade confianza en la capacidad de la empresa para entregar productos y servicios en línea con las demandas de los clientes y otros interesados. El uso de un organismo de certificación independiente, como DNV, que está acreditado o aprobado por un propietario de esquema o entidades de acreditación nacionales, añade confianza adicional.
Muchas organizaciones pueden comenzar su camino hacia la certificación con el único objetivo de satisfacer las demandas de ticket-to-trade. Puede que no comprendan completamente lo que implica y los beneficios que pueden obtener. Casi con certeza, sin embargo, la mayoría de las organizaciones aprenden más sobre sí mismas y sus operaciones.
Aunque ciertamente hay más, a continuación puede encontrar 6 razones convincentes para certificarse:
1. Mejora la comprensión de tu negocio
Cualquier que sea el producto o servicio que ofrezca una organización, existen procesos críticos que deben ser gestionados adecuadamente. Para que un sistema de gestión sea conforme, los procesos relevantes deben ser identificados, documentados en la medida necesaria e implementados de acuerdo con los requisitos del estándar elegido. Un sistema de gestión que funcione bien permite que cualquier persona, en cualquier momento, entienda qué se debe hacer, cómo y por qué. Adoptar un enfoque basado en sistemas ofrece la oportunidad de identificar posibles debilidades y oportunidades de mejora y de gestionarlas de manera continua. Además, ayuda a comprender el contexto de tu negocio y las demandas de los interesados, así como los riesgos y oportunidades conectados. Esto te ayuda a mejorar las relaciones con los interesados y alcanzar los objetivos empresariales.
2. Aumenta tu atractivo en el mercado
A menudo, la razón para obtener la certificación proviene de un cliente que requiere que sus proveedores estén certificados según un estándar reconocido. Obtener la certificación satisfará ese requisito específico del cliente; sin embargo, inevitablemente crea un atractivo hacia un rango más amplio de clientes. Algunos pueden no haber considerado previamente tu negocio porque no estaban seguros de tu desempeño en aspectos de calidad, seguridad o medio ambiente, por ejemplo. Más allá de la certificación, un sistema de gestión de alto rendimiento también contribuye a mejorar el rendimiento, lo que ayuda a asegurar la satisfacción y retención del cliente.
3. Impulsor de la consistencia y las mejoras
Adoptar un sistema de gestión basado en estándares reconocidos internacionalmente es un facilitador para asegurar un rendimiento consistente de tus procesos. Implementar un sistema de gestión basado en las mejores prácticas reduce el potencial de variaciones en el rendimiento, ya sea relacionado con la calidad, la seguridad, el medio ambiente u otros aspectos, y es un motor para alcanzar los objetivos de tu organización. La certificación en sí es una evaluación independiente del rendimiento. Cuando se encuentra que el sistema de gestión es conforme, esto lleva a un certificado; sin embargo, la comprensión adquirida contribuye a la mejora continua para mejorar aún más tu rendimiento. Las acciones tomadas no solo te ayudan a mantener tu sistema de gestión, sino que también pueden ayudar a mejorar la eficiencia y reducir costos.
4. Mejora el rendimiento y la satisfacción entre los empleados
Con un sistema de gestión implementado, los empleados saben qué se espera de ellos. Procedimientos claros e instrucciones proporcionan la orientación necesaria para realizar tareas de manera que coincidan con los objetivos y metas de la organización. La concienciación y la formación para garantizar la participación y la implementación de los empleados son esenciales para el éxito. Por lo tanto, la participación de los empleados es esencial para alcanzar la certificación y satisfacer las demandas de los clientes.
5. Mejora tus controles operativos y eficiencia
La certificación del sistema de gestión ayuda en el esfuerzo por abordar riesgos y aumentar el control. Facilita la implementación de procesos de mejores prácticas. Por ejemplo, la certificación ayuda a descubrir brechas con respecto a los requisitos de un estándar, lo que significa que la empresa puede dirigir acciones correctivas a áreas específicas que pueden mejorar los controles operativos y la eficiencia y mejorar la entrega de productos o servicios. La certificación también contribuye a su conocimiento de los procesos de mejores prácticas y mejora su adaptabilidad a los escenarios comerciales cambiantes y a la licitación de nuevos negocios.
6. Reduce el número de auditorías de partes externas
Para gestionar las cadenas de suministro y decidir con quién hacen negocios, muchas empresas hacen de la certificación a estándares específicos un requisito. El simple hecho de estar certificado según un estándar reconocido por una tercera parte independiente suele ser suficiente para demostrar la idoneidad. Además, al ser auditado y certificado según un estándar reconocido, puede satisfacer todas las demandas de los clientes, eliminando la necesidad de múltiples auditorías sobre el mismo tema. Si un cliente prefiere un estándar diferente al que ya cumple su sistema de gestión, el nuevo proceso de certificación debería ser más fácil, ya que ya tiene una competencia considerable y un sistema de gestión sólido.
El camino hacia la certificación
Como organismo de certificación independiente, DNV trabaja con los clientes a lo largo de su viaje de certificación. Desde la formación hasta las auditorías y las herramientas digitales, le ayudamos a prepararse, lograr la certificación y mejorar continuamente su sistema de gestión. Desde saber dónde fallan la mayoría de los sistemas de gestión y cómo solucionarlo hasta autoevaluaciones, evaluaciones comparativas de rendimiento y cómo sacar más provecho de cada auditoría con la Risk Based Certification™ , DNV se compromete a ser su socio de certificación antes, durante y después de la auditoría.
Encontrará más información sobre DNV y sus servicios de certificación y formación en El proceso de certificación.
Autor: Stuart Brewer